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Chichapolitik, Segunda entrega

chichapolitikSegunda entrega:

Jacqueline Fowks – CHICHAPOLITIK, huellas y signos de la cobertura de la campaña electoral – páginas 181, 182, 183, 184, 185 y 186

A UN MES DE LAS ELECCIONES: MAYOR PRESENCIA DE LA PRENSA EXTRANJERA

A partir de marzo del 2000, las informaciones sobre el Perú en la prensa internacional se vuelven más frecuentes y no solo reproducen informaciones de agencias internacionales o difunden opiniones, sino que llegan al país los enviados especiales.

Promperú, institución oficial que promueve la imagen del Perú en el extranjero, dispuso un Centro Internacional de Prensa que estuvo operativo hasta una semana después del 9 de abril, pero no se reabrió para la segunda vuelta electoral (151).

(151) Se abrió un centro de prensa pero ya no fue administrado por Promperú.

La llegada de corresponsales extranjeros – coincidente con el surgimiento de una serie de denuncias relacionadas con la presunta falsificación de un millón de firmas utilizadas para la inscripción de una de las cuatro agrupaciones que respaldaban la candidatura de Alberto Fujimori, y otras más que cuestionaban la depuración del padrón electoral – permitió que las controversias en torno al proceso se difundieran con mayor frecuencia y detalle en la comunidad internacional.

Por ejemplo, la denuncia de la falsificación de firmas por el frente independiente Perú 2000 alcanzó amplia repercusión en la prensa foránea.  El 16 de marzo, la cadena CNN (152) y Clarín información al respecto, además de dar a conocer las declaraciones de Alejandro Miró Quesada, director de El Comercio – diario que difundió la denuncia -, quien acusaba al gobierno de tomar represalias en su contra y pretender “utilizar sus influencias en el Poder Judicial para reabrir un proceso legal que permita poner el control del diario en manos de un grupo minoritario de accionistas afines al gobierno”.  El 17 de marzo hicieron lo propio los diarios El Tiempo (Bogotá, Colombia), La Nación (Argentina) y las agencias periodísticas Associated Press y France Press.

(152) CNNenEspanol.com 16 de marzo de 2000, sección Latinoamérica y el Caribe.

El 20 de marzo, El País también informó sobre la falsificación de firmas.  En un reportaje titulado “Fujimori acusado de falsificar firmas para promover reelección”, el enviado Francesc Relea da detalles de la denuncia de El Comercio.  Del mismo modo lo hizo El Universal de México, que se refirió al pedido formulado por el jefe de la MOE-OEA, Eduardo Stein, para investigar a la ONPE y despejar “la sombra de dudas” que este hecho puso sobre la institución.

 Días después de los ataques que sufrió el Defensor del Pueblo, Jorge Santistevan de Noriega, debido a su actuación con respecto a la denuncia sobre la falsificación de firmas, el reportero de planta del Wall Street Journal, Matt Moffett, escribió desde Lima una información que destacaba los éxitos de la Defensoría del Pueblo al desafiar al gobierno (153).  “Santistevan no es poderoso pero consigue que las cosas se hagan: el magistrado de la persuasión…”,  eran algunos de los calificativos en una información que aludía a 200 quejas recibidas por el Ombudsman referidas solamente a la campaña electoral.

(153) Peru’s Ombudsman Takes on Fujimori After Success Fighting the Government”, en Wall
           Street Journal, 9 de marzo del 2000, fue también publicado el 10 de marzo – en
           castellano – en la edición de Wall Street Americas, que aparece en la sección Economía
          del diario El Comercio.

El 12 de marzo, el New York Times, en nota firmada por el enviado Clifford Krauss, indicaba que los observadores internacionales y la oposición “reclamaban foul” (154) durante la campaña presidencial peruana.  La nota se refería a las consecuencias de la denuncia de falsificación de firmas y los ataques de la prensa “amarilla” contra la Defensoría del Pueblo y el diario El Comercio.

(154) Clifford Krauss es el enviado para cubrir Sudamérica.  Cubrió las elecciones en el Perú y
            en Chile del 2000, y en 1997 informó sobre la crisis de los rehenes del MRTA en la
           residencia del embajador japonés en Lima.

Otros medios publicaron informaciones sobre el mismo caso: El Nuevo Herald (2 y 15 de marzo), El Mercurio de Chile (1 de marzo), Jornal do Brasil (17 de marzo), Hoy de Ecuador (17 de marzo), El Universal de Venezuela (7 de marzo) ABC de España (17 de marzo) y El Diario de Bolivia (17 de marzo) (155).  La denuncia se dio a conocer en El Comercio de Lima el 29 de febrero del 2000.

(155) Asociación Transparencia, Datos electorales Nº28, 21 de marzo del 2000.

El desarrollo de estas noticias motivó que la prensa extranjera pusiera su atención en el Perú, así, los despachos enviados por los corresponsales llegaron a ocupar los principales titulares y las páginas de ediciones especiales creadas con motivo del proceso electoral.  Ese fue el caso de El País Digital.  Este medio inició el 30 de marzo del 2000 una página web de enlaces con las noticias relacionadas con este tema y en la que también se informaba sobre los pronunciamientos emitidos por los observadores internacionales.  Otro ejemplo es el de la cadena CNN, que inició el bloque informativo Elecciones 2000: Perú una semana antes de que éstas tuvieran lugar (156).

(156) El viernes 7 de abril del 2000, CNN también desarrolló una edición extraordinaria titulada
           “Elecciones 2000: Perú”, en la cual se hizo una reseña y análisis de la situación electoral
           por la que atravesaba el país, durante una hora.

El mes de marzo, la imagen proyectada en el exterior sobre las elecciones peruanas no era alentadora: el 7 de marzo, el columnista de El Nuevo Herald, Andrés Oppenheimer, escribió: “Existe una creciente preocupación en círculos diplomáticos de Washington D.C. de que el proceso de las elecciones del 9 de abril en Perú esté tan viciado que lo que estemos viendo en ese país podría definirse como un golpe de Estado en cámara lenta”,  en referencia a un término utilizado semanas antes por el senador estadounidense Paul Coverdell.

Asimismo, el editorial de El Miami Herald del 15 de marzo del 2000 calificó como “trucos sucios” (dirty tricks) las medidas adoptadas por el presidente Fujimori para lograr una tercera reelección.  Bajo el título “Los trucos sucios de Fujimori amenazan la integridad de las elecciones en el Perú”, el diario estadounidense hizo breve referencia de las medidas legales que permitieron su postulación,  así como las denuncias de Santiago Cantón, relator de la OEA, que cuestionaban el respeto del gobierno por la libertad de prensa en el Perú.  En dicha oportunidad, este medio informó: “Acabemos con la ficción de que el presidente Fujimori está practicando la democracia.  Llamen a Alberto Fujimori lo que es: un dictador que empleará cualquier medio ilegal para mantenerse en el poder, (…) Fujimori y su gobierno están recurriendo a todo un espectro de trucos sucios para asegurar su reelección el 9 de abril” (157).

(157) Reproducido por La República, 16 de marzo del 2000.

A inicios de abril, sin embargo, la imagen del gobierno peruano – y por tanto también la del presidente Fujimori – comenzaba a desgastarse.  La revista Newsweek,  por ejemplo, dedicó su portada del  3 de abril a anunciar una entrevista que el periodista Joseph Contreras le hiciera al presidente Fujimori en torno al impacto negativo que tuvo, sobre su popularidad, la denuncia divulgada por El Comercio en torno a la adulteración del millón de rúbricas.  Del mismo modo, en una entrevista realizada a la periodista británica Sally Bowen (158) y publicada el 2 de abril en El País, el jefe de estado peruano fue calificado como “un hombre solitario y desconfiado que ha encontrado en el poder todo  lo que necesita”.

(158) Autora del libro El Expediente Fujimori (Fujimori’s file), Lima: Lima Peru Reporting, 2000.

Asimismo, se difundieron las denuncias y cuestionamientos al proceso electoral, los pronunciamientos adversos de los observadores electorales y de países industrializados , el inicio de una arremetida mediática en contra del candidato Alejandro Toledo y el papel representado por el asesor presidencial, Vladimiro Montesinos, entre otros; propaladas por estos medios, las informaciones también contribuyeron a ensombrecer la candidatura del presidente peruano.

Al respecto, Clarín informó el 30 de marzo sobre la firma que hiciera Fujimori  - en calidad de presidente – de un decreto supremo que entregaba títulos de propiedad a un grupo de comerciantes cuando realizaba una gira proselitista.  Ese mismo día, La Tercera de chile dio cuenta de la “última y costosa arremetida de Fujimori”,  con referencia a los elevados gastos en los que habría incurrido el jefe de estado para la elaboración de su campaña.  El 3 de abril, The New York Times elaboró un reporte sobre el gran poder del asesor Vladimiro Montesinos.  Al día siguiente, nuevamente Clarín dio cuenta de la “guerra sucia” contra el candidato Alejandro Toledo – a partir de la entrevista difundida a través de un canal peruano y en la que se le imputa al economista la paternidad de una menor de doce años -.

El desgaste de la imagen de Fujimori, y del gobierno peruano en particular, se contrastó sin embargo con la fuerte presencia del candidato Alejandro Toledo, sobre todo las dos semanas más próximas a las elecciones del 9 de abril.  “Candidato peruano refleja el nuevo orgullo indio” tituló Anthony Faiola, del Washington Post (159), una nota publicada en la primera plana de la edición impresa y de la electrónica.  El artículo estaba acompañado por una foto y además disponía de enlaces al sitio web de Perú Posible, un informe del Centro Carter-NDI y la página web sobre elecciones en el Perú del Centro de Estudios de la Democracia de la Universidad de Queens, Canadá (160). El País lo calificó como “el fenómeno Toledo”  en un reportaje difundido el 4 de abril, mientras que The New York Times hizo lo mismo al publicar una crónica de su vida titulada: “Un fenómeno peruano: De la miseria a la presidencia”.

(159) www.washingtonpost.com/wp_dyn/articles/A48152-2000Mar30.html

(160) Desde fines de 1999 este sitio web dirigido por la investigadora Catherine Conaghan fue
            actualizado constantemente por estudiantes canadienses y por colaboradores
           peruanos.

Otros medios que también escribieron sobre Toledo como la alternativa que podría vencer a Fujimori fueron: Página 12 (entrevista a Alejandro Toledo publicada el 29 de marzo y una nota con el título ”El chino murió, el cholo lo mató”, del 6 de abril);  Houston Chronicle (“Fujimori confronta un oponente difícil”, 4 de abril);  Clarín (“Toledo denuncia manejo perverso que hace Fujimori para su reelección: “Si hay fraude, yo mismo encabezaré la rebelión”, 5 de abril); revista Cambio (“Las espuelas del cholo”, 5 de abril);  El Mercurio (“Eliane Karp, clave en campaña de Toledo”, 7 de abril;  L’Ansa (“Toledo lucha como David frente a Goliat”, 7 de abril); El País (“Alejandro Toledo, una creación del electorado”, 9 de abril).

Los periodistas locales constantemente recurrieron a los colegas extranjeros para presentar otros enfoques sobre los hechos, es decir, los convirtieron en fuente.  Éste fue un aspecto novedoso en esta campaña electoral.  Pablo Biffi, enviado especial de Clarín, comentó que constantemente eran convocados por los medios locales y de provincias para ser entrevistados (161).  Con respecto al pedido de diversos actores políticos que se dirigían concretamente hacia la prensa internacional, para que grabara o registrara los hechos, Biffi relató un acto posterior al 9 de abril del 2000, cuando un grupo de estudiantes y artistas plásticos organizó una protesta contra la ONPE en la entrada del Palacio de Justicia: “La gente nos abrió paso, nos decían “prensa extranjera, gracias por contar la verdad”, fue una cosa muy rara, muy curiosa, al final terminaron pidiendo que nos sacáramos una foto con ellos” (162).

(161) Comunicación personal, 12 de junio de 2000.

(162) Idem.

Entre los medios que dieron una cobertura mayor a las elecciones peruanas pueden contarse The New York Times con su enviado Clifford Krauss; el Washington Post y su periodista Anthony Faiola, el español El País y su enviado Francesc Relea, Clarín de Argentina y Pablo Biffi, Matt Moffett del Wall Street Journal.

Si bien la difusión de las características del proceso electoral peruano fue constante en la prensa internacional – en especial en abril del 2000 – y se convirtió en un actor adicional en la arena política nacional, Lucien  Chauvin, periodista estadounidense afincado en el Perú por más de diez años, consideró que, aun reconociendo que la prensa extranjera jugó un papel fundamental, “fueron los medios peruanos, particularmente Canal N, quienes tuvieron un papel importante en las elecciones”.  Esto se debió a que los corresponsales y enviados no podían desplazarse siempre a provincias o no podían cubrir hechos simultáneos.  Dicho canal de cable fue también de gran ayuda para el desarrollo de la labor informativa de la prensa extranjera.

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